La palabra cartomancia, etimológicamente, se compone de dos términos: carto (papel) y mancia (adivinación), por lo tanto la cartomancia es un método de adivinación del futuro a través de las cartas. Existen muchas barajas de cartas que se usan en la cartomancia, pero las que más se conocen son las del Tarot, es decir una baraja que contiene varias figuras conocidas como Arcanos Mayores y Arcanos Menores. Quien sabe descifrar el lenguaje divino de las cartas o del Tarot, es conocido como Tarotista, aunque el término en si mismo deriva de las cartas del Tarot y sería más adecuado usarlo para quien hace la lectura sólo de esta baraja.

La mayoría de las veces son mujeres las que se dedican a la lectura de las cartas, puesto que la mujer es más sensible hacia ciertas temáticas en cuanto usa de manera natural el hemisferio derecho del cerebro; el hemiferio derecho del cerebro, de hecho, está especializado en las sensaciones, sentimientos y otras habilidades especiales. Las mujeres que saben descifrar el lenguaje de las cartas para la adivinación del futuro se llaman Tarotistas. Muchas de ellas también cuentan con capacidades personales de clarividencia y pueden usar las mismas cartas u otros métodos (runas, imposición de manos…) para ver el futuro.

Y ya hemos introducido otros método de adivinación del futuro, no sólo el Tarot u otras barajas de cartas por lo tanto. Efectivamente es posible ver el futuro de varias maneras y es una cosa que a los clarividentes les sale natural. ¿Pero que es un clarividente?

En verdad hay que hacer una distinción entre videncia y clarividencia. La videncia es la capacidad natural y paranormal de las personas que pueden captar fenómenos más allá de los cinco sentidos, es decir, que possen un sexto sentido. Este sexto sentido se puede manifestar da diferentes maneras, ya sea con corazonadas, premoniciones, intuiciones, telepatia, clariudencia (quien oye las voces de espíritus), sueños… La clarividencia es una capacidad del vidente, en concreto es la capacidad de conocer lo que está ocurriendo a otras personas que están lejos del sujeto. En definitiva, los videntes pueden tener muchas capacidades distintas.

Pero ahora vengamos a lo concreto,

¿Qué hacemos los tarotistas y videntes?

Tras haber aclarado los varios términos ya queda mucho más claro que es lo que hacen tarotistas y videntes. Los tarotistas son personas que conocen el lenguaje oculto de las cartas usadas para la adivinación del futuro, ya sea la baraja del Tarot u otras barajas; mientras que los videntes son personas con capacidades extrasensoriales.

Existen tarotistas que también son videntes, pero no es necesario ser un vidente para descifar el lenguaje de las cartas. Es posible consultar los tarotistas sobre ciertos temas que nos dan preocupación: amor, salud, dinero, trabajo. Se puede hacer una pregunta concreta o bien preguntar sobre uno de los cuatro temas en general. El tarotista echará las cartas y las descifrará: hay que ver que cartas salen, si boca arriba o boca abajo, en que secuencia…, todas características únicas. El tarotista o la tarotista verá que significado tienen las cartas en esa determinada posición, porque de eso se trata, de descifrar un verdadero lenguaje divino y traducirlo de manera comprensible para así poder dar un responso.

Los videntes pueden usar o no las cartas para su lectura del futuro, así como otros métodos, ya lo hemos explicado antes. Podemos consultarnos con un vidente del tipo clarividente, por ejemplo, para saber lo que le pasa a una persona o lo que está haciendo; quizás dudemos sobre la sinceridad de una persona, quizás nos pone los cuernos, el clarividente puede ayudarnos a ver lo que está haciendo esa persona. El clarividente también tiene otras facultades, por ejemplo puede ver si una persona padece o no de algún problema de salud (psicodiagnosis), puede encontrar objetos perdidos, puede ver lo que ha hecho una persona tocando un objeto suyo o ver lo que ha pasado en un determinado lugar (psicoscopía); también puede ver imágenes del pasado, presente o del futuro usando una superficie reflectante como la clásica bola de cristal o el agua (hialoscopía). En fin, que hay muchos modos diferentes de ser vidente y de ver el pasado, el presente o el futuro; por lo tanto un vidente nos puede ayudar de diferentes maneras a aclarar las situaciones que nos preocupan, ya sean de amor, salud, trabajo o dinero.

En beneficio de las personas

Tarotistas y videntes siempre los ha habido a lo largo de la historia, por ejemplo ahí tenemos a Juana de Arco que oía la voz de San Miguel (según decía ella misma) y que hasta lo vio acompañado por ángeles. Así pues, si la naturaleza ha dado a estas personas estas capacidades, ¿por qué no usarlas para el beneficio de las personas?